GENERACIÖN OKI DOKI

Recuerdan ustedes aquel programa de televisión que se emitía los domingos en la mañana, mismo que contaba con personajes como Tomillo o Canela. Este programa heredaba el formato de algunos programas gringos donde un grupo de adolescentes vivían un sinnúmero de aventuras en un set de TV. Oki Doki contó con la participación de algunos jóvenes hijos de actores, productores y músicos de nuestra farándula criolla. Entre ellos nuestro Michael J Fox Colombiano, es decir el famoso Coco, o Chichila la hija de la productora Tony Navia, ó, la mas nombrada aún, nuestra queridísima Verónica Orozco.

Este grupo de inquietos adolescentes por aquel entonces pasaban por los 12, 13 y 14 años, tuvieron la posibilidad de llegar a los medios y con el tiempo les hemos visto crecer y madurar. Encarnan aquello que una generación como la nuestra ha tenido de primera mano, los medios, pero para que les ha servido?

Observemos solo algunos casos, dos de las actrices continúan aun en el medio televisivo con incipientes actuaciones en telenovelas y seriados de RCN, que de calidad muy poco, como todo en ese canal. Uno de los actores masculinos, el famosísimo Tomillo ha recorrido innumerables programas, seriados y remedos de agrupaciones musicales, sin mucho éxito. La figura principal y supuestamente mas exitosa es Verónica Orozco quien ahora se vende como estrella musical con su sensacional éxito de Quítame las bragas.

Si bien a la mayoría nos importa un bledo las infidencias de estos seudoactores, si resulta paradójico la importancia, despliegue mediático y espacios que figuras mediocres como estas llegan a tener. Así, estos personajes resultan según los medios los emblemas de quienes bordean los 30 y su vida es un punto de referencia para mirar esta generación.

Les recuerdo que en esta misma generación encontramos hijos de líderes desaparecidos como el de Manuel Cepeda que tienen mucho que preguntar y reclamar a un país que vió en silencio como asesinaban a sus padres y madres. También se encuentra la generación clasemediera que si bien pudo con esfuerzos llegar a la universidad difícilmente ha podido tener un espacio laboral. En esta generación también se encuentra el grupo de líderes y gestores de clase media y baja de barrios de Bogotá que, bien sea por la situación económica o el embarazo temprano, dejaron los procesos participativos para quedar silenciados en un trabajo de 8 a 5 por un salario mínimo. En este grupo también encontramos la tercera generación (Las dos primeras son las de quienes tiene entre 30 y 50 años) que decide luego de terminar sus estudios no tener hijos. Igualmente es la primera generación hija de los medios y en este sentido mas mediática que las anteriores.

Se dice que el cambio en una sociedad se puede dar a partir de los grupos generacionales mas grandes, es decir cuando en las tazas de natalidad se presentan picos positivos que años después se reflejan en una sociedad mayoritariamente joven, son oportunidad de cambio. Cambio pues plantea un numero poblacional mayor al de otras generaciones que ha futuro puede representar rupturas y cambios favorables si se aprovecha adecuadamente. Actualmente el país es un país joven, pues un gran numero de la población se encuentra en este grupo, inclusive lo es desde que nuestra generación comenzó a ser joven. Pero entonces si hemos sido favorecidos en número, quizás en posibilidades de educación y al parecer en espacios de participación y a los 30 nos representa la mujer de Quítame las bragas qué generación somos realmente. Una generación que al tener aparentemente todo resuelto dejo de preguntarle al país.

Somos una generación Okidoki que se confundió y volvió los medios no solo la forma sino el fondo.?